Con el propósito de fortalecer el sistema de protección social de nuestro país y ayudar a quienes más lo necesitan, comenzó a regir el seguro obligatorio y de carácter solidario del que podrán gozar los padres y madres que hagan uso de la Ley Sanna, promulgada y aprobada en el Gobierno de Michelle Bachelet.
Mediante este beneficio, las mamás y papás que son trabajadores, podrán acompañar a sus hijos de entre 1 y 18 años de edad, que se encuentren afectados por una condición grave de salud y de alto riesgo vital, al hacer uso de una licencia médica hasta por 90, 60 o 45 días según el caso, y de esa manera, podrán acompañarlos, cuidarlos y durante ese tiempo, recibirán una prestación económica que reemplaza total o parcialmente la remuneración financiada por este seguro.
Los padres podrán acompañar a sus hijos e hijas menores afectados por enfermedades catastróficas como el cáncer, trasplante, estado terminal, accidente grave con riesgo de muerte o secuela funcional severa y permanente.
Cada una de estas enfermedades se irán sumando de forma gradual, partiendo por el cáncer y sus cuidados paliativos y luego se irán incorporando las demás contingencias. Si ambos padres son trabajadores podrán hacer uso de la licencia en conjunto o sucesivamente, por día completo o media jornada. La ley incluye además que si el progenitor hace uso de Sanna, no podrá ser despedido.